jueves, 20 de septiembre de 2007

Nuestro esperma es de mala calidad
y nuestros hijos tienen miedo.
A veces son cosas como esta las que me hieren
a veces creo, que en el peor de los casos
siempre será algo que le pase a los otros
a veces tan solo siento que es así
para cualquiera de nosotros.
Entonces, no vengas a contarme cuentos de anuncio
ni a querellarte conmigo
con tu sonrisa de ginebra con tónica
dáme, aunque sea por una vez, algo autentico
me servirá cualquier cosa por pequeña que sea
a condición que sea autentico, te digo.
Si solo estas delante de mí
para vivir en un planeta de felicidad perpetua
o para vivir en el planeta del lado oscuro de las cosas
no va a servirme un pimiento
haberme prendado del calor de tu sonrisa
ni del olor que no huele de tu cuerpo.
Y los minutos, ya, son tan escasos
que es una pena, mi niña...
mi cielo...
desperdiciarlos.